Jubilación Flexible

Es quizás, la modalidad de jubilación que menos ciudadanos acceden en España. Y es que compatibilizar la jubilación con el trabajo es muy buena idea pero… estar jubilado totalmente y querer volver a currar, no se ve mucho ¿Verdad?

En este artículo, te he preparado una guía sobre este tipo de jubilación: en qué consiste, que requisitos necesito, quién puede acceder a ella y quién no y más información.

Te resuelvo todas esas dudas a continuación.

¿Qué es la Jubilación Flexible?

La jubilación flexible se trata de trabajar con un contrato a tiempo parcial y al mismo tiempo cobrar una pensión.

Es necesario que se empiece a trabajar una vez que ya estas jubilado y se debe reducir el tiempo de la jornada laboral un 25% como mínimo. En cuanto a la cuantía también se tiene que reducir en una proporción inversa a la reducción de la jornada de trabajo.

Entonces, un pensionista que pertenece a la jubilación flexible significa que deja de recibir una parte de su pensión porque opta por dedicar una determinada cantidad de tiempo diario para volver a trabajar.

Reducción de la jornada laboral con la Jubilación Flexible

La jornada se debe de reducir entre 25% y un 50% del tiempo. En definitiva, las horas de trabajo han de ser del 75% al 50% en comparación con una jornada a tiempo completo.

Requisitos para la Jubilación Flexible

A la hora de pedir la solicitud de esta jubilación, es necesario reunir los siguientes requisitos:

  • Estar ya jubilado y cobrando su correspondiente pensión.
  • Tener como mínimo 62 años y 4 meses de edad y haber cotizado 33 años; 61 años y 8 meses con 34 años y nueve meses o más de cotización. Excepto los mutualistas que se les permite solicitar la jubilación flexible a partir de los 60 años.
  • Notificar a la Seguridad Social que quieres empezar a realizar una actividad laboral estando jubilado a tiempo parcial.

¿Quién puede acceder a la Jubilación Flexible?

Todos los empleados de los diferentes regímenes de la Seguridad Social tienen derecho a la jubilación flexible. Pero como he comentado anteriormente, siempre tiene que ser un contrato a tiempo parcial.

¿Y quién no puede?

No pueden acceder a la jubilación flexible los de las Fuerzas Armadas, los de la Administración de Justicia y los funcionarios civiles del estado.

¿Pueden acceder los Autónomos?

Los autónomos actualmente no pueden recurrir a la jubilación flexible y continuar siendo trabajadores por cuenta propia. Sin embargo, una solución es la jubilación activa, que sí pueden entrar los autónomos.

¿Cómo solicitar la Jubilación Flexible?

Como hemos dicho en los requisitos, debes de comunicarle a la Seguridad Social tu nuevo deseo de trabajar. Para hacerlo, hay que pedir cita previa en la Seguridad Social. Puedes hacerlo de tres formas:

Haciendo clic aquí, a través de la App, por la pagina web o bien llamando por teléfono.

¿Qué documentos hay que presentar?

  1. DNI, o NIE y pasaporte
  2. Llevar rellenado el formulario oficial de la solicitud de jubilación.
  3. En caso de que otra persona lo va a solicitar por ti, recuerda que debe de aportar la documentación de representación legal.

RECUERDA: Cuando estés completando el formulario, recuerda marcar el recuadro «Jubilación Flexible»: comunicación de inicio de actividad laboral simultánea a la condición de pensionista en el punto 2.4. Y no olvides introducir los datos solicitados en el campo «Declaración de actividad».

¿Cómo calcular la cuantía de la Jubilación Flexible?

Para saber cuanto vas a cobrar en la jubilación flexible, es bastante sencillo. Hay que restar el porcentaje de la jornada que realizas en tu trabajo a tu pensión de jubilación.

Poniendo un ejemplo, si cobras 1000 euros de pensión con un contrato a media jornada, pues la mitad: 500 euros.

No obstante, si tu jornada laboral es más corta, y sólo trabajas una cuarta parte del tiempo en comparación con un trabajo a tiempo completo (25%), tienes que restar el porcentaje anterior a los 1000 euros. Así, en el segundo caso, recibirá 750 euros al mes.

Diferencias entre Jubilación Flexible, Jubilación Parcial y Jubilación Activa

Las personas normalmente suelen confundir estos términos o no tienen claro que ofrecen cada una de ellas. Pero esto es normal, ya que estos tres tipos de jubilación son casi similares, pero la verdad es que tienen sus diferencias.

¿En qué se diferencian?

Jubilación Parcial

En la jubilación parcial está pensado para las personas que están realizando su actividad laboral y quieren empezar a cobrar una pensión de jubilado.

La diferencia que existe entre la parcial y la flexible es que en la parcial no abandona su trabajo, sino que comienza a rebajar su jornada y a cobrar la pensión a la misma vez que está trabajando. Por otro lado, la jubilación flexible si es necesario que haya abandonado la actividad laboral y una vez que está jubilado, hacerle saber a la Seguridad Social que quieres volver a trabajar.

Teniendo en cuenta la reducción de tiempo de trabajo, mientras que en la flexible no solo puede llegar hasta el 50%, en la parcial puede alcanzar hasta el 75%, en caso de que la empresa contrate a un relevista a jornada completa.

Sin embargo, la pensión funcionan igual tanto en una como en la otra: el porcentaje de tiempo que no se ha trabajado se percibirá en concepto de jubilación.

Jubilación Activa

Mientras que en la jubilación flexible, el jubilado quiere volver a retomar la vida laboral, en la activa, la persona sin dejar el trabajo, cobra la pensión de jubilado y reduce su jornada un 50% al mismo tiempo que realiza la actividad laboral.

Es más, en la jubilación activa, los requisitos para entrar en ella son distintas a las de la flexible y también en la activa puede compaginarse con cualquier tipo de jornada laboral, incluso la completa.

En cuanto al tema de cotizaciones, en la activa no afecta a la cuantía de jubilación. En cambio, si se modifica en la jubilación flexible.

Cotizar en la Jubilación Flexible

En la jubilación flexible seguirás cotizando a la Seguridad Social por el trabajo que realices.

Cuando pertenezcas a la jubilación flexible, con los resultados del trabajo al que estas actualmente, se utilizará para recalcular la base reguladora, por lo tanto, lo que cotices en tu empleo sirve para que cuando abandones dicho empleo y vuelvas a la jubilación normal, te valdrá para mejorar el ingreso mensual.

De este modo, nunca será una desventaja para las ganancias futuras.

En caso de que salga una cantidad inferior, se conserva los números que tenias anteriormente, por lo que no hay que preocuparse. Cotizarás en base del tiempo que inviertas en el trabajo, es decir, por las horas de trabajo que has realices.

¿Con qué no es compatible la Jubilación Flexible?

La jubilación flexible es incompatible con las pensiones de incapacidad permanente.

Pero si es compatible con la incapacidad temporal o de maternidad.

En resumen…

La jubilación flexible suena perfecto para aquellas personas que se encuentran jubilados y quieren volver a retomar la vida laboral. Eso sí, el contrato no debe de ser a jornada completa.

Además, el jubilado podrá seguir cotizando y después se le recalculará su base reguladora. Sin duda, que para el que quiera volver a trabajar mientras cobra la pensión de jubilado, es una gran opción.